domingo, 13 de enero de 2013

Reencuentro - A Todo o Nada





El programa había terminado y yo tenía la necesidad de hablar y aclarar las cosas cuanto antes. Ya no podía seguir así.

Paula se apuró a buscar a Moro y avisarles a sus amigas que ya se iban y yo mientras la seguía con la mirada intentando juntar valor para enfrentarla de una buena vez.

PP: _No te vayas, quedate un toque y hablemos. Me parece que no da para más seguir así. – dije frenándola, antes de que saliera al pasillo para irse.

Pau: _Hablemos tranquilos más tarde Pedro, las chicas están clavadas desde el medio día haciéndome el aguante y además está lleno de gente. No creo que sea el momento ni el lugar.

PP: _por qué siempre seguimos estirando las cosas Paula? Nunca es buen momento ni lugar… vivís poniendo por encima a los demás… es ahora que tenemos que hablar. Yo no doy más.

Pau: _qué decís Pedro? No te dije que hablemos el año que viene… te digo que hablemos mas tarde. No pongo por encima a nadie. Pero este no es el momento. – dijo elevando la voz un poco enojada.

PP: _mas tarde no puedo porque esta noche viajo. Por favor quedate y hablemos.

Pau: _no sabía que viajabas a dónde te vas? – dijo con un tono un poco más conciliador.

PP: _me voy a hacer una presentación a Salta, salgo en unas horas.

Pau: _Ah mira! – y su tono ya mostraba irritación de nuevo.

PP: _ya estaba arreglado Paula, no pongas tono como si lo hubiera hecho a propósito… - dije cansado de nuestras vueltas.

Pau: _no puse tono de nada Pedro. Tenés ganas de pelear? 

PP: _Tengo ganas de que aclaremos las cosas, por eso te estoy pidiendo que te quedes – le hablé con un tono paciente y buscando su mirada para que entendiera que de verdad lo necesitaba.

Pau: _Pedro yo también necesito que hablemos, pero no quiero que sea tipo trámite porque estás apurado para irte a algún curro. Creo que mínimamente nos merecemos hablar tranquilos, sin gente alrededor ni esperándonos, no te parece? 

PP: _si esperamos que todo sea ideal, entonces no vamos a hablar nunca – solté dejando escapar un tono irónico.

Pau: _definitivamente vos tenés ganas de pelear y yo es lo que menos quiero. Pensá lo que quieras Pedro. Yo creo que no es lugar y momento. Cuando vuelvas y tengas tiempo, me avisas y hablamos. – 

Agarró las llaves del auto de su cartera, y empezó a caminar dejándome con la palabra en la boca, cosa que no había nada que me irritara más.

Sabía que ella tenía razón, pero no podía evitar que me enojara. Y en verdad el enojo no era con ella, sino con la situación.

Estaba harto de dar vueltas, de que todo siempre nos resultara complicado, enroscado, difícil. Estaba cansado de las presentaciones, que aunque en un momento me habían servido para llenar mi tiempo y no pensar para no extrañarla, ahora me robaban el poco tiempo libre que tenía… estaba cansado física y psíquicamente… necesitaba parar la pelota.

La dejé irse enojada y eso me enojó más. Me estaba comportando como un pendejo caprichoso y en nuestra relación ya no había más espacio para caprichos.  El problema, definitivamente lo tenía yo.  Yo era el que estaba ansioso por resolver nuestra situación YA, yo era el que no tenía tiempo y encima la responsabilizaba a ella.  Quizás no estaba tan mal que nos tomáramos esos días para ordenarnos, bajar a la tierra y después sí hablar tranquilos.




Salí del canal hecha una furia. Otra vez volvíamos 20 pasos para atrás con Pedro y el tema ya me tenía harta.  Yo sentía que había hecho lo que tenía que hacer… por una vez intenté ser madura, no dejarme ganar por la ansiedad y tratar de cuidarnos para que todo salga lo mejor posible.

Hasta sentía que había logrado bajar mi nivel de histeria y de locura dando pruebas más que claras de lo que quería y esperaba de nosotros.

Obviamente que quería hablar con Pedro y poner las cosas en limpio de una vez… pero no por eso iba a permitir que habláramos en un pasillo, con todo el mundo en el medio, y resolviendo nuestras cuestiones contra reloj porque el nene tuviera que irse a hacer una presentación a la otra punta del país.

No podía ser tan caprichoso. No se daba cuenta que así no llegábamos a nada?

A veces Pedro se enceguecía tanto que era imposible hacerlo entrar en razón. Pendejo, malcriado y caprichoso. Ok bueno yo también lo era, pero trataba de ponerme las pilas. Esta vez no había hecho nada malo. Si él tenía que viajar a hacer una presentación, definitivamente no era mi culpa. Y aunque sus presentaciones en boliches me irritaban sobremanera (no por el trabajo, sino por la vida de noche, los viajes, la compañía de sus amigotes más fiesteros y todo lo que eso arrastra), nunca le había manifestado nada en contra, y me guardaba mis opiniones. Quizás alguna vez estando juntos, había sido tema de discusión, porque el poco tiempo libre para compartir que teníamos había que cederlo para que él pudiera tener sus curritos… pero ahora no tenía derecho a reclamarle nada, y no lo había hecho ni lo iba a hacer.

Me descargué en el auto volviendo locas a las chicas… pobres mis amiguitas! Me habían bancado la tarde entera y encima ahora las llevaba a cenar en agradecimiento y les seguía comiendo la cabeza.

Basta Paula! Cambiá el chip. Dejá correr el tiempo y esperá a ver como sigue todo. La ansiedad nunca es buena consejera. Pedro se va a dar cuenta solito de sus caprichos y seguramente a la vuelta vamos a poder aclarar las cosas… y ahí me di cuenta que ni siquiera sabía cuando volvía… bueno, seguramente de alguna manera, ya me iba a enterar. Después de todo en Tw siempre me enteraba hasta de lo que no quería.

Esa madrugada me costó muchísimo conciliar el sueño.
Entre la pseudo efedrina que me tenía acelerada y toda la locura del día, arrastraba una ansiedad que no me permitía bajar revoluciones.  Empecé a sentir la angustia de extrañarlo horrores.

Ahora que parecía que nos íbamos a jugar de nuevo, que lo íbamos a volver a intentar… necesitaba sentirlo mío y cerca cuanto antes. Necesitaba tener esa seguridad.

Solamente Pedro podía devolverme la paz que yo tanto necesitaba. Pedro con su amor caprichoso, con su  incondicionalidad, con su contención infinita, con sus demostraciones quijotescas, con su humor particular, con su serenidad diaria, con su paciencia a pesar de su impaciencia, con su perfecta forma de complementarme, con esa ternura que desataba en mí…

Necesitaba desahogarme porque así no iba a poder dormirme más.
BBM a Pedro

“Te extraño y necesito que hablemos.” – iba a ser directa, estaba harta de las idas y vueltas.

PP: “Yo soy caprichoso, pero vos también. Te dije que era mejor que habláramos hoy. Era obvio que no nos íbamos a aguantar esperar” 

Pedro me respondió automáticamente se lo mandé… como si tuviera el celu en la mano y estuviera esperando que yo le escribiera.

“No quiero pelear. Sólo necesitaba decírtelo”

PP: “yo tampoco quiero pelear Pau. Y en parte tenías razón, no era el momento y me enojé por eso… no con vos, sino con la situación. Yo también te extraño y te necesito.”

“Cuidate por favor. Hablamos cuando vuelvas.”

PP: “Tratá de descansar. Ya es muy tarde y estás con fiebre. Cuidate y mejorate.”

“Si. Gracias. Beso”

PP: “Beso. Te quiero”

“Yo también te quiero Pepe, volvé pronto”

PP: “lo más pronto que pueda…”

Y así nos despedimos esa madrugada.

El domingo amanecí a cualquier hora, pasado el mediodía. Me esperaban en casa de Papá con mis hermanos para un asado que arrancó tardísimo por mi culpa. Me llenaron de mimos al verme medio caída, un poco por mi estado gripal, y mucho por mi estado anímico. 

El encuentro con Pedro y que no hayamos terminado de definir nuestra situación, me había dejado de cama, literalmente.  La Pepi se ofreció a venir a mi casa a hacerme compañía y acepté encantada, no me bancaba más estar sola y extrañarlo tanto. Necesitaba mantener mi cabeza ocupada en otras cosas para no dejarme ganar por la ansiedad.

Mi hermanita siempre lograba distraerme y yo disfrutaba todo el tiempo que compartía con ella. Aprovechaba para malcriarla y volcar mi atención en ella, apartándome  del foco de angustia que me generaba la situación con Pedro.

Supe por Tw que Pedro había regresado el domingo a la noche a Bs As. Un rato más tarde me llego un mensaje suyo.

PP: “Llegué hace un rato. Estás mejor?”

“Si gracias. Vino la Pepi a cuidarme y hacerme compañía. Cómo te fue?” – estaba intentando ser cordial y quitarle tanta carga a nuestros mensajes…

PP: “Bien. Me alegra que estés acompañada, aunque es una pena porque no podemos hablar”

“mañana? Igual ahora ya se hizo tarde…” – Pedro y sus propuestas inoportunas!

PP: “mañana tengo ensayo a la mañana , a la tarde los móviles y a la noche el vivo. Sólo tengo libre la tarde después de Este es el Show. Podés?”

“tengo una producción a la tarde que no sé a qué hora termina. Si querés te aviso y vemos si coincidimos…”

PP: “Ok. Hasta mañana entonces. Que descanses!”

“Hasta mañana. Beso”




Llegué a Bs As, en el primer vuelo que las cenizas permitieron aterrizar… Le avisé a Paula que ya estaba acá, con toda la ilusión de que nos pudiéramos encontrar esa noche, aunque ya era tarde y me imaginaba la respuesta.

Tuvimos un intercambio de mensajes en buenos términos, pero nuestra conversación otra vez se veía postergada hasta nuevo aviso… ya que ambos teníamos una agenda cargada de cosas y no parecían coincidir nuestros horarios disponibles.

Estas cosas eran las que ya todavía no aprendía a dominar y me fastidiaban llenándome de ansiedad. Otra vez me iba a dormir sintiéndome un nene de 5 años que acababa de hacer caprichito porque no consiguió lo que quería.

Estaba claro que si quería algo serio con Pau, iba a tener que sacarme esta puta mala costumbre de encima. 

A la mañana me fui a ensayar al gimnasio que estaba cerca de su casa. Tenía un rato disponible entre que terminaba y tuviera que entrar a hacer los móviles para Este es el Show. 

Paula me había dicho que tenía una producción a la tarde por lo que supuse que si no era en ese momento, difícilmente nos encontráramos un rato hoy.

Terminé de ensayar y le mandé un mensaje…
“estás levantada? Acabo de terminar de ensayar y estoy cerca de tu casa…” – tendría suerte esta vez?

Pau: “estoy paseando a Moro, querés sumarte?” – respondió decidida

“me encantaría, decime dónde los encuentro”  

Pau: “estoy llegando a la veterinaria para comprarle una pipeta, te acordás dónde queda? Creo que es a 1 cuadra del Gym. Nos vemos ahí.”

Perfecto! Por fin la suerte estaba de mi lado… 

Agarré mi bolso, lo tiré dentro del auto y me fui caminando a encontrarme con Pau. Estaba todo muy cerca y no valía la pena mover el auto. No había hecho a tiempo de ducharme ni cambiarme, pero no quería dejar pasar la oportunidad, ya que después estaba seguro que no la iba a encontrar.

Cuando doble la esquina, la vi entrando a la veterinaria. Aproveche para prenderme un cigarrillo y bajar un poco mi ansiedad. Me transpiraban las manos y todavía no tenía nada armado para decirle.
Los dos teníamos claro que nos debíamos una charla pero no estaba seguro sobre cómo empezarla, ni hacia dónde apuntarla.

Me recosté en un auto que estaba estacionado justo frente a la veterinaria para esperarla y verla salir. 

Qué le iba a decir? Cómo empezábamos esa conversación? 

Vi que se abría la puerta y Paula salía junto a Moro de la correa. Buscó con su cabeza hacia ambos lados y no me vio. Yo decidí jugarle una bromita, para arrancar descontracturando y me escondí hasta verla comenzar a caminar, llevando a Moro hasta un árbol.

Aproveche para acercarme por su espalda y cuando la tuve cerca le dije con mi mejor tono sensual:

PP: _quién pudiera ser tu perro para recibir tantos mimos y dormir entre tus sábanas…

Paula se sobresaltó pero al darse cuenta que era yo, me miró apenas de costado, divertida  siguiéndome el jueguito.

Pau: _Lo de los mimos puede ser, lo de las sábanas no te creas… ahora que tiene un padre ausente, no tiene quien lo apañe y a la cama no se sube. 

PP: _ah pero que madre estricta resultaste…  - Moro ya me había reconocido y me hacía fiesta para saludarme y yo lo alcé.

Pau: _perro vendido, quien te da de comer todos los días, te lleva a pasear y te hace mimos… como para que te entregues al primero que te saluda por la calle?

Dijo Pau en tono de reproche hacia Moro que no paraba de darme lengüetazos.

PP: _No es vendido, es inteligente y reconoció en mí al padre. Está buscando un cómplice que le habilite el camino hacia tu cama…  sabe que soy un buen socio. – dije en tono gracioso – Vení pichicho, vos y yo vamos a negociar – y comencé a hablarle en secreto a Moro que encima me escuchaba atento. 

Paula nos miraba divertida y relajada. A pesar de que tenía sus anteojos de sol puestos, sabía exactamente que su mirada era de amor y ternura en ese momento. No había nada que yo disfrutara más que  verla así después de todo lo que habíamos pasado.

Pau: _sos un tarado… son dos tarados porque Moro encima te escucha como si te entendiera… anda a saber las barbaridades que le estás diciendo… ojito con hacerle promesas y no cumplirlas ehh… mirá que a los hijos no se les miente. – Dijo Paula aprovechando para tirarme un palito encubierto.

PP: _jamás le mentiría a un hijo, y mucho menos a la madre. – dije haciéndome cargo del palito y ordenando las ideas – Lo que yo prometo lo cumplo, o al menos intento agotar las posibilidades.

Pau: _entonces mejor no prometer nada y dejar que las cosas fluyan… - dijo Pau mientras comenzaba a caminar hacia su casa.

PP: _me encanta la idea… dejemos que las cosas fluyan. – Baje a Moro y comencé a caminar al lado de ella. – Hola no? Creo que todavía no nos saludamos… soy Pedro, encantado.

Pau me miró de costado mordiendo su labio y moviendo su cabeza en señal de no poder creer mi forma de encararla… la tenía descolocada y aún estaba sin reacción… no quise abusarme de su buen humor, ya que conocía sus ciclotimias y lo que empezaba divertido, si lo estiraba podía llegar a volar por el aire. Así que lo tomé nuevamente por sorpresa, la abracé de costado y dándole un beso en su mejilla le dije:

PP: _Hola tonta. No sabés cuánto extrañaba verte sonreír. – y me la quedé abrazando de costado mirándola ampliar su sonrisa mientras me miraba con timidez a través de sus anteojos. – Sos tan linda cuando estas así… - y agregué por lo bajo – mansita…

Pau: _Eu! – reaccionó pegándome con su mano en mi hombro, castigándome por mi broma, mientras se soltaba de mi abrazo – no te abuses de tu buena suerte, debe ser la gripe que se chupó todas mis energías.

Y ambos nos reímos como tarados de algo que no era tan chistoso, sabiendo que la risa venía más de felicidad que de lo que estábamos diciendo.

Caminamos el resto del trayecto hablando de pavadas, poniéndonos al día con las novedades del otro y buscando prolongar la buena onda que habíamos logrado tener.

Llagamos a casa de Pau y me invitó a subir. Mientras ella ponía agua para el mate, me sonó el teléfono y era de Ideas pidiéndome que estuviera temprano para producir a Marian en Este es el Show porque faltaban dos productores que no habían logrado llegar de no sé dónde por el temita de las cenizas.

Emboladísimo por la interrupción y por tener que dejar a Pau sin que pudiéramos hablar tuve que despedirme para ir a trabajar.

Ella lo tomó bien y me despidió dándome seguridad.

Pau: _andá tranquilo. Dijimos recién que era bueno dejar que las cosas fluyan… ya vamos a tener tiempo de hablar bien. Gracias por la visita, fue un lindo encuentro.

Y nos abrazamos largando un suspiro, sabiendo que estábamos llegando de a poco a donde queríamos llegar. 

PP: _hablemos mas tarde y veamos si logramos encontrarnos. Avisame cuando sepas tus horarios de la producción – dije dándole un cariñoso beso en su mejilla – Gracias por el paseo! – y me alejé de su puerta, sin ganas pero sabiendo que las cosas estaban muy bien entre nosotros.




Estaba contenta, casi feliz.
El encuentro con Pedro había sido relajado y lindo. No habíamos tenido tiempo de hablar y dejar las cosas claras entre nosotros pero estaba implícito lo que ambos queríamos y eso ya nos daba tranquilidad a los dos.

A la tarde fui a hacer la producción para Avon que tenía pendiente desde antes de viajar a México y cuando estaba saliendo, me llamaron de Multitalent para una reunión de imprevisto por una propuesta que les acababan de hacer desde Ideas y querían comentarme.

Nos encontramos en un café con Paul y Willy y me dijeron que me querían de nuevo en el Bailando para reemplazar a Pamela Anderson. Creo que mi reacción no fue la que esperaban, porque mi primera respuesta fue la misma que venía dando desde principio de año. NO. 

Ellos intentaron hacerme entrar en razones… hablamos de los pro y los contras, y la verdad es que mi NO tenía que ver principalmente con Pedro. No por evitar estar cerca de él… sino más bien por una cuestión de no invadir espacios. Éste era su año en el Bailando y yo no quería ni competir, ni distraer la atención de él. 

Me pidieron que lo pensara, que lo hablara con él y me juraron que desde Ideas estaban dispuestos a cuidarnos y respetarnos por sobre todas las cosas. Ellos querían que yo aceptara porque sabían que era una excelente propuesta para mi carrera. Yo en cambio no estaba dispuesta a hacer nada que pudiera afectar mi relación con Pepe. Estábamos a un paso de reconciliarnos y no quería ni pensar en exponernos, o complicarnos con temas laborales.

Me despedí de ellos prometiendo darles una respuesta definitiva al día siguiente, no había mucho tiempo para pensarlo porque Pamela los había dejado colgados sin pre aviso y necesitaban resolverlo ya.
Iba camino a casa y recibí una llamada del Chato… por suerte estaba manejando y pude  usar eso como excusa para que no me volviera loca con presiones.

Obvio que era tentador volver al Bailando, la experiencia del año anterior había sido más que hermosa y sólo tenía palabras de agradecimiento para todo lo que había surgido de allí. Si lo miraba desde ese lugar, yo a Ideas la debía mucho y ya se habían ofendido conmigo a principio de año cuando dije que no iba a participar. Por supuesto habían comprendido mis motivos y respetado mi distancia, pero ahora volvían a la carga poniéndome otra vez contra la pared.

Llegué a casa un poco acelerada. La presión no se lleva bien conmigo o yo no me llevo bien con ella pero juntas hacemos una dupla espantosa.  Entré a ducharme para bajar el acelere y llamé a mi viejo para comentarle y pedirle su opinión.

Para mi padre las cosas no eran tan complicadas, él era mucho más relajado y se tomaba las cosas con otra filosofía. En ese aspecto se parecía más a Pepe… actuaban más haciéndole caso a su sistema gánico y sin analizar todo tan en profundidad como solía hacer yo. Me relajó un poco escucharlo y restarle importancia a lo que pudiera salir mal. Para él había que jugársela siempre y perseguir de cerca las cosas que uno quiere. Hasta me daba a entender que con Pedro las cosas funcionaban mejor para nosotros estando cerca que separados.

Corté con él y recibí mensaje de Pepe:
“podés hablar?”

Decidí llamarlo directamente.

Pau: _ puedo! Cómo estás? – dije apenas sentí que me atendía.

PP: _estaba contento y ahora que te escucho estoy mucho más contento. – me dijo con tono de galán.

Pau: _no necesitas chamuyarme Pepe. Qué hacías?

PP: _algún día vas a entender la diferencia entre un chamuyero y yo… Yo sólo digo lo que me pasa, hacete cargo de lo que provocás vos sin buscar evadir responsabilidades calificándolo de “chamuyo” – dijo con tono calmo y sincero

Pau: _Hoy estás con todo. – contra ataqué.

PP: _Hoy estoy contento. Bancatelá.

Y ambos reímos cómplices, como dos enamorados atontados frente a las demostraciones sencillas que despiertan a las mariposas dormidas.

Pau: _ok, me la banco. Yo también estoy contenta.

PP: _viste?… y yo no te digo que sos una chamuyera… acaso recibiste alguna propuesta interesante?– dijo jugando un poco al misterioso – no hablo de una propuesta indecente porque no nos dieron tiempo y espero que ningún otro se atreva a hacerte ese tipo de propuestas… 

Pau: _PEDROOOOOOOOOOO!

PP: _PAULAAAAAAAA!!!! Decime que no, porque si no salgo corriendo a buscar al atrevido. – dijo en tono de chiste.

Pau: _no hay nadie tan atrevido como vos, despreocúpate tonto.

PP: _pero bien que este tonto te pone contenta – dijo en tono canchero.

Pau: _hoy si.

PP: _esto es histórico… te estoy grabando Chaves. Lo voy a usar a mi favor para que te apiades de mí cada vez que me mande una…- y bajando un poco la voz dijo algo tímido – aunque espero no mandarme ninguna más.

Su último comentario me llenó de ternura. Los dos éramos de mandarnos cagadas que nos afectaban complicando las cosas al pedo, no era sólo él.

PP: _bueno… no me respondiste, recibiste o no una propuesta interesante?

Pau: _y vos que sabes al respecto? – pregunté curiosa

PP: Yo tengo informantes, a mi no se me escapa nada, y menos si tiene que ver con vos – Pepe estaba con todas las luces y sin vueltas y eso me animaba a hablar con confianza.

Pau: _recibí una propuesta y no creo que acepte – dije sin vueltas. – me da miedo, ya sabés lo que pienso.

PP: _Pau, podés confiar en mí por una vez? Y hablo desde lo profesional… porque lo personal ya lo vamos a aclarar pronto – dijo seguro – podés entregarte, relajarte, dejar de pensar y disfrutar de todo lo bueno que se vive acá? En Ideas te extrañamos todos… vos sabés que éste es tu lugar. Te lo ganaste vos. No te lo regaló nadie. Vos tenés que estar en el Bailando, no te niegues esa oportunidad ni te alejes de lo que te hace bien. 

Escucharlo tan convencido me dejó conmovida. Pedro siempre estaba para mí, pensando en mí, cuidándome, conteniéndome, dándome fuerzas e inspirándome. Pedro despertaba lo mejor de mí y yo lo amaba también por eso. Era tan blanco, tan transparente, tan despojado de envidias y vanidades… tan entregado, agradecido y apasionado por lo que hacía y por ese amor a su trabajo, a su empresa y a lo que le había dado un sentido a su vida era que me inspiraba respeto y admiración. Su forma de tomarse este tipo de cosas era sana, y me estaba dejando contagiar por él.

PP: _si no me respondés nada es porque te emocionaste – dijo sabiendo lo que había provocado – ves que tengo razón Pau?, este es tu lugar. En ningún otro lugar vas a estar mejor que acá, ni más contenta.  A vos te hace feliz bailar, te conozco y sé que lo extrañas. Vení y recuperá ese espacio. 

Pau: _me da miedo Pepe, no creo que lo podamos manejar – dije con la voz temblorosa.

PP: _gorda yo te necesito acá. Vos me das fuerzas, sos mi inspiración. – dijo ahora también con voz temblorosa – a mí lo que más miedo me da es no tenerte cerca – dijo convencido – yo se que estando juntos podemos sobreponernos a todo. Confiá en mí. Esa es nuestra fórmula.

Era increíble el poder tranquilizador que Pedro tenía en mí. Él sabía exactamente qué decir para darme confianza. Siempre me había aconsejado bien en mi paso por Ideas y su opinión era muy valorada por mí. 

Pau: _gracias. – dije intentando cortar con el tema, ya había escuchado lo que necesitaba y ahora solo tenía que meditarlo conmigo misma para tomar una decisión.

PP: _vas a aceptar? – dijo contento

Pau: _lo voy a pensar – solté  - ya es un avance, hasta recién era un NO rotundo. – dije con tono amistoso para dejarlo conforme – No me apures Pepe, sabés que no soy buena en este tipo de situaciones….

PP: _ Justamente porque te conozco y sé que tu cabecita en estas cosas siempre te juega en contra es que te pido que esta vez confíes y me hagas caso a mí.  Vos aceptá que nosotros vamos a estar perfecto.

Pau: _lo decís tan convencido….

PP: _Tomalo como un desafío… dejame demostrártelo.

Pau: _dejame que lo hable con mi almohada. Necesito procesarlo.

PP: _ok. Me parece bien… porque lo que no sabes es que esta tarde coloqué en tu almohada un chip con mensajes subliminales… y entrené a Moro para que te hable en sueños y terminar de convencerte. Así que como mi plan no puede fallar, te dejo que duermas mucho para que mañana me confirmes que aceptás. Mirá que pagué fortunas por el chip y por el entrenamiento de Moro… no me vas a hacer tirar la plata…

Pau: _sos un tarado.

PP: _pero te quiero y te cuido como nadie. Así que confiá en mí. Hasta mañana hermosa, que descanses.

Pau: _hasta mañana lindo y gracias por todo. Sos muy importante para mí.

PP: _tanto como vos para mí. Descansa!

Y así nos despedimos. Corté con Pepe y automáticamente apague todo y me fui a dormir. Había sido un día intenso y necesitaba realmente procesar las cosas y más que nada los sentimientos.

El martes nos tomó por sorpresa la repercusión de una foto que alguien había subido a Twitter en la que se nos veía a Pepe y a mí caminando abrazados.

Se ve que el día anterior, mientras paseábamos con Moro alguien nos había enganchado y subió la foto, desatando un sin fin de elucubraciones a las que no pensaba darle cabida.

Hablamos temprano con Pepe quien terminó de convencerme para que aceptara entrar como reemplazo al Bailando.

Esa tarde tampoco podíamos encontrarnos porque él estaba invitado en Este es el Show y yo al programa de Ángel de Brito, con el que me había comprometido hacía unos días sin saber todo lo que pasaría en el medio, y a quien no podía dejar colgado. Si bien ambos estábamos a la misma hora en canal 13, yo preferí que no nos cruzáramos para que nadie pueda hablar ni sacar ninguna conjetura. A Pepe le emboló un poco que no lo esperara pero comprendió mis motivos.

Sorteamos el tema de la foto sin demasiado problema, ya que hacía poco que había ocurrido lo de la foto en el balcón, y nos lavamos las manos diciendo que esta foto también era vieja… total, excepto la persona que la hubiera sacado, el resto no tenía como comprobarlo.

Con Pedro quedamos que nos veríamos esa noche ya que él había logrado zafar de tener que ir a la grabación del bailando.

A la tarde busqué a Zaira en casa de sus padres y nos fuimos para casa a ponernos al día y a ayudar a la cachorra a distraerse un poco. Pedro venía a cenar con nosotras, pero la muy boca floja de Wanda, anunció por tv que Zaira estaba en casa, y la puerta de mi edificio se lleno de medios haciendo guardia, impidiendo por un lado que Pepe se acercara e imposibilitando que Zaira saliera para volver a su casa.

Más allá de que no era culpa nuestra, Pepe otra vez se mostró molesto por tener que postergar nuestro encuentro. Discutimos telefónicamente , hasta que Zaira garró el teléfono y hablando de otros temas, logró tranquilizarlo y ablandarlo un poco.

Esos caprichitos de Pepe era lo primero que íbamos a tener que cortar… Si queríamos volver ambos debíamos dejarnos de boludeces e intentar madurar para apostarlo todo.

El miércoles al mediodía vino Wanda a casa a buscar a su hermana y a terminar de ponernos al día entre las tres. Era increíble como Wanda cuidaba a su hermana. Me recordaba mucho la relación que yo tengo con Delfi, por quien daría lo que sea y a quien defendería con uñas y dientes si llegara a pasarle lo que le pasó a Zaira.

Pedro me llamó cuando terminaba de ensayar para pasar por casa, pero estábamos almorzando con las chicas y no daba. Yo sabía que tenía que hacerme un tiempito urgente para él o iba a explotar en el momento menos pensado.

Le propuse vernos a la nochecita ya que hoy no había programa, pero me dijo que se iba a lo de Iudica a ver el partido de River.

Ni se me ocurrió decirle que viniera a casa a verlo, porque por lo mal que estaba jugando River en estos momentos, seguramente Pepe terminaría con un humor de perros y lo que menos quería era padecer esa situación.

Otro día más que nuestra charla se vería postergada. 

Al día siguiente yo tenía que ir a Ideas para firmar el contrato, y se lo dije para intentar vernos antes o después.

Quedamos en que hablábamos a la mañana siguiente para ponernos de acuerdo.

Esa noche después de que River perdiera, una vez más y el descenso ya se viera como algo imposible de sortear, recibí el llamado de Pedro.

Era tarde y se lo notaba un poco desbordado.

PP: _ Hola, que bueno que me atendiste, tenía miedo que durmieras – dijo directo.

Pau: _Hola, estaba acostada viendo una peli, todavía no dormía.

PP: _voy para tu casa – tiró sin vueltas.

Pau: _bueno, te espero.

Estaba claro que ya ninguno quería postergar lo que tanto necesitábamos.

En menos de media hora, Pedro me tocó el portero y bajé a abrirle.

Había estado tan colgada pensando en qué nos íbamos a decir y cómo empezar a hablar que ni se me pasó por la cabeza sacarme la ropa de entre casa que tenía. Estaba cero producida, recién bañada y en joggineta ya que hacía frío y lo único que estaba en mis planes era pasear a Moro antes de dormirme.

Pau: _Hola – dije dándole un beso en la mejilla al abrir la puerta de calle. – me acompañas hasta el kiosco y de paso a sacar a Moro?

PP: _Hola – dijo algo tímido – dale vamos.

Caminamos hasta la esquina sin hablarnos ni mirarnos. Era de esos momentos incómodos en los que hay tanto para decir que no se sabe como arrancar… o que quizás ya estaba todo dicho, y sin embargo había que ponerlo en claro.

PP: _yo compro, vos quedate con Moro – me dijo al llegar al kiosco – algún chocolate en especial? 

Pau: _tan evidente es que necesito chocolate? – dije divertida

PP: _digamos que te conozco un poco. Lo de siempre? – preguntó canchereando

Pau: _si – dije yo divertida.

Me encantaba comprobar que Pepe me conocía y me tenía presente. Esos pequeños gestos, me llenaban de seguridad.

Pau: _tengo fernet pero no tengo Coca – le avisé por las dudas que estuviera en sus planes tomarse uno en casa.

PP: _ querés emborracharme Chaves? – dijo con tonito sensual – que pretende usted de mí?

Y lo dijo cerca de mi oído haciéndose la Coca Sarli, lo cual me arrancó una carcajada por la ocurrencia…

Pedro entró al kiosco, compró mil cosas diferentes, le dieron una bolsa, pagó y vino hasta donde estaba yo.

PP: _listo – dijo divertido – ya tenemos las provisiones de todo lo que necesitamos para pasar esta noche – y me guiñó el ojo pícaro.

Lo único que yo rogaba ante ese comentario, era que no se le hubiera ocurrido comprar forros en el kiosco de la esquina de mi casa, donde me conocían con nombre y apellido y donde por lo menos una vez por día yo iba a abastecerme de comida chatarra.

Ni siquiera me atreví a mirar la bolsa para no tener que lamentar nada… ojos que no ven…

Pau: _Dame un chocolate – dije en tono de desesperación – lo necesito.

Pedro se rió divertido y agarró de adentro de la bolsa un block.

PP: _Tomá, no quiero sufrir las consecuencias de tu síndrome de abstinencia… - y continuó con tonito insinuante – abstinencia de chocolate…. Porque de la otra estoy dispuesto a pagar cualquier precio… dame un ratito nomás. 

Pedro estaba mas pillo que nunca y yo solo pude largar una carcajada. Me encantaba que estuviera desinhibido. Todo lo que teníamos para decirnos ya estaba claro y era mejor poder encarar la charla relajados.

Llegamos a casa y en el ascensor no paramos de mirarnos, pero ninguno dijo una palabra.

Cuando estaba parada abriendo la puerta sentí a Pedro pararse pegándose a mi espalda y sentir su respiración en mi nuca, generó un escalofrío que atravesó mi cuerpo.

Pau: _Pasá, ponete cómodo. Querés tomar algo?  - dije intentando recobrarme

Pedro pasó, se sacó la campera dejó la bolsa en la mesita del living y agarró la coca.

PP: _ Dejame a mí, yo lo preparo – me dijo canchero. – te tomás un fernet conmigo? – preguntó alzando la voz desde la cocina.

Pau: _dale, total no pienso salir ni manejar.

PP: _excelente – dijo divertido – me encanta que te dejes llevar – dijo con doble sentido

Me saqué las zapatillas y la campera, puse algo de música y prendí las luces bajas para apagar la de arriba. Había que terminar de crear el clima…

PP: _Te extraño. Demasiado 

Pedro me miraba a los ojos mientras se acercaba a mí y abría la conversación sin vueltas. Yo tomé de su mano el vaso de fernet y bebí un poco sosteniéndole la mirada. Necesitaba reaccionar a lo que acaba de decirme.

Pau: _Yo también te extraño demasiado – dije sentándome en el sillón y dejándole un espacio a Pedro para que él hiciera lo mismo.

Pedro se sentó y nuestras miradas seguían clavadas en los ojos del otro, como manteniendo una conversación paralela a la que podíamos recrear con palabras.

PP: _y que hacemos con todo lo que sentimos? – preguntó sincero

Pau: _ No creo que esta vez yo tenga respuestas para darte Pedro. Debe ser la primera vez en mi vida que no estoy dejándome llevar por lo que me dice la cabeza y estoy haciendo esfuerzos sobre humanos para no pensar.

Pedro se sonrió satisfecho por lo que estaba escuchando.

PP: _Estás cambiada. Estás tranquila y hasta me atrevo a decir que es la primera vez que te veo segura de lo que querés. – me dijo mirándome con ternura.

Pau: _Puede ser. – dije sincerándome – estoy cansada de pensar tanto las cosas para que después todo salga al revés. Hay un refrán que dice que si querés que las cosas cambien, tenés que empezar por cambiar la forma en que las haces… y eso es lo que me propuse  esta vez. Necesito que todo sea diferente, por eso la primera en actuar diferente voy a ser yo.

Pedro me miraba enamorado y yo me enamoraba a cada minuto más de él.

PP: _Yo sé que lo intentamos varias veces, pero esta vez de verdad siento que es diferente. En todo este tiempo me di cuenta de muchísimas cosas, buenas y malas. Me cayeron un montón de fichas y por lo que puedo ver a vos también te pasó. – me dijo acomodándome un mechón de pelo que se me había caído sobre la cara para verme mejor a los ojos – Siento que sos la mujer de mi vida Paula, ya no es un juego de conquista, o estar enganchado con la minita que te atrae o te provoca… siento que te quiero en mi vida para siempre. – y me buscó la mirada levantándome la cara con una caricia.

Dejé que me acariciara porque necesitaba sentirlo, sus palabras eran justo lo que yo necesitaba oír. Acomodé mi cara sobre su mano y con mis manos busqué la otra suya para sentirlo más cerca. Todavía no encontraba las palabras para decirle pero eso no parecía ser impedimento para demostrarle todo lo que sentía.

PP: _Vení   - y me acomodó sobre su pecho – Yo también necesito sentirte cerca.

Nos abrazamos por varios minutos sin hablar. Sólo eran caricias y el latido de nuestros corazones.

En un momento después de un profundo suspiro logré separarme de su pecho para mirarlo a los ojos y decirle lo que tenía que decirle.

Pau: _Nunca nadie me hizo sentir esto que me hacés sentir vos. Con nadie más puedo sentirme yo sin tener que hablar, o explicarme. No tengo dudas Pedro de que te amo y que quiero que estemos juntos. Pero necesito que esta vez sea diferente. Necesito que nuestra relación sea de absoluta entrega y compromiso, porque siento que estoy poniendo mi corazón entero en tus manos, no me guardo ninguna carta, estoy apostándolo todo y si pierdo… pierdo todo.

PP: _Yo también estoy apostándolo todo mi amor. Tampoco quiero que sigamos dando vueltas ni haciendo chiquilinadas para escaparnos de lo que sentimos. Yo te entrego mi corazón y lo pongo en tus manos para que vos lo cuides. Confío en que no hay nadie mejor que vos, para hacerlo. Siento que llegó el momento de jugarnos a todo o nada.

Pau: _me gusta el concepto de a Todo o Nada – dije con una media sonrisa, mientras acariciaba su frente y jugaba con su pelo – yo te prometo que voy a cuidarte y a proteger tu corazón con todo mi amor y que todo lo que haga de acá en más va a ser siempre apostando a lo mejor para nosotros – dije acariciando su boca mientras detenía en ella mi mirada.

PP: _Te amo Paula. Con todo mi corazón y mi alma. Cada parte mía es tuya. Nunca te haría mal, quiero que estés segura de eso. Pase lo que pase, siempre voy a hacer lo que sea para cuidarte y protegerte. No puedo prometerte que no vas a sufrir, y ojalá no suceda nunca, pero quiero prometer sólo aquello que pueda cumplir… y te prometo que por sobre todas las cosas, voy a defender tu amor y a cuidarlo de lo que sea, inclusive hasta de mis mambos.

Pedro me agarró la cara con ambas manos y me acercó muy despacito hasta su boca, dejando nuestras frentes y narices pegadas y nuestros labios apenas rozándose.

PP: _Te amo Pau. Soy tuyo, me aceptas?

Yo sonreí estallada de amor, mientras unas lágrimas caían de mis ojos sin que pudiera detenerlas.

Pau: _sólo si vos aceptas que yo soy tuya y te amo con todo mi ser.

Pedro secó mis mejillas con besos para terminar en mi boca dándome el beso más hermoso de mi vida. Un beso cargado de emociones, de entrega, de agradecimiento y de profundo amor.

This is the end …. Todos sabemos cómo continua esta bella historia de amor!


Dedicadísimo a Princess May... quien me recibió en el Tw mundo y me ayudó a dar esos primeros pasos...  
que todo salga bien mañana corazona! Besos por mil y toda la buena energía para vos. (@MayBarrientos)

15 comentarios:

  1. NOOOOOOOO, me mori de amor! No hay relato mas perfecto que éste! tal como me lo imaginada, después de pedro ver a river, tal como lo había relatado mariano en la cocina.. de verdad, escribis bárbaro, espero que no abandones y te inspires con alguna otra idea de ellos! besos y suerte!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. soy una estudiosa! jajajajaja si voy a escribir de algo que pas{o intento analizar las fuentes... esos pequeños datos es lo que ayuda a darle credibilidad ;)
      que bueno que gustara.... seguramente algo me va a inspirar.
      ya llegará un nuevo Epi!
      Besos y mil gracias por leer y disfrutarlo!

      Eliminar
  2. Mori posta :) me encantan tus cortos, toidavi me los re imaginaba y todo. Espero que subas mas cortos por que de verdad son los mejores y mas elaborados :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias!!! claro, seguramente pronto vuelva la inspiracion... ya llegara algun nuevo Epi! y gracias por leer! ;)

      Eliminar
  3. me dejaste sin palabras,me encanto...Felicidades realmente escribís increíble,no lo dejes de hacer !!!
    esperando ansiosa el siguiente corto ojala lo subas pronto...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Noe... muy agradecida a tan lindos comentarios.
      Prometo seguir escribiendo... ya bajara el nuevo Epi a inspirarme ;)

      Eliminar
  4. genial.. me encanto!!! :) me encanto el relato tu manera de contarlo d everlo.. muy bueno!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Mil gracias! que bueno que guste ;)
      me alegra que lo disfruten!

      Eliminar
  5. awww..me hiciste llorar, de tan solo acordarme de esos dia! No tengo otra cosa que decirte MIL GRACIASS! REalmente me encanta como escribis, como redactas , sos brillante! me encantooo ;D..soy @meli_pauliters..si tenes ganas pasate x mi blog, recien vah x el primer corto q subo http://cortosdedicadosapyp.blogspot.com.ar/ .. graciaass

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias a vos Meli por leer y por comentar! Me alegra que te haya gustadp tanto! Ahora me paso a leerte. Besito!!

      Eliminar
  6. Respuestas
    1. nooooo no llores que estos chicos tienen finales felices!!!! jajajjaa bueno si es de emocion, un poquito se permite ;)
      Gracias por leer!

      Eliminar
  7. Me encanto!!! Igual que las otras partes del "Reencuentro" que estuvieron geniales. Ahora, tu final "This is the end …. Todos sabemos cómo continua esta bella historia de amor!" yo agregaria una cuota de "Continuara..." Mi punto es que para completar "los espacios en blanco" VOS SOS GENIAL!!! ... Si te copa y tenes ganas de seguir, POR FAVOR HACELO, aca tenes una BIG BIG FAN... Me encantaria tu version de esos espacios en blanco sobre lo que pasaba con PyP y la bailarina de PP (que entre nosotras, nunca me la banque y siempre me dio a zorra)... o esas historias de "se hace un test de embarazo cada 20 dias" que daban la sensacion que estaban buscando un BB y despues con tanto trabajo frenaron... o tambien esos roses de combivencia de "para algunas cosas es tu casa y para otras es nuestra casa" .... no se, pasaron mil cosas en la segunda mitad del 2011, en todo el 2012.... y AHORA con el embarazo no confirmado y aun ninguna propuesta de casamiento x parte de PP.....
    Hay taaaaaaaaanto tanto para escribir, y sos taaaan buena haciendolo, que please, daaaaaaaale, no te hagas rogar y espero leer pronto otra parte que tal vez ya no sea "Reencuentro" pero "Juntos somos invensibles" jajaja
    ¿Que opinas?
    Un beso enome, @PatriciaSaat

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. jajajajajjaa gracias por disfrutarlo tanto y tomarte el tiempito para comentarme siempre!
      Quedate tranquila que mi intención es seguir escribiendo.
      Como puse en la explicacion del Blog que figura al costado... no respeto cronologias... no quiero terminar haciendo una nove y abrurrirme en ciertas partes... prefiero que sean episodios sueltos.. algunas basados en la realidad y otros inspirados por situaciones como el de año nuevo... ;)
      Nuevos Epis vendran... enjoy them!

      Eliminar