Vi la pista de aeroparque desde
el aire y la ansiedad que sentía desde anoche me subió a la garganta.
Tranquilizate Paula, bajá un
cambio que así no llegas a la tarde, me dije para mí misma. Inspiré profundo,
solté el aire… sacudí mi cabeza intentando poner mi mente en blanco y me
preparé para el aterrizaje.
Bajé del avión y encaré directo
la puerta de salida. Por mensajito Gonza me había avisado que me esperaba
afuera en el auto y con Moro.
Me felicité por haber llevado
sólo equipaje de mano sin tener que despacharlo para no tener que esperar ni
demorarme más. Estaba un poco jugada de tiempo. Debía apurarme.
No había dormido prácticamente
nada en toda la noche. El desfile había terminado más tarde de lo previsto y
después tuve que asistir a una mini fiesta que organizó la gente de la
producción para todos los que habíamos participado.
En el medio había discutido con
Pedro por teléfono, cosa que me llevó a comerme la cabeza el poco tiempo que
pude apoyarla en la almohada.
Hacía unas semanas que no nos
veíamos por mis viajes y por que él había comenzado ya a trabajar en la
producción del nuevo programa “Soñando por bailar”.
Las veces que estuve de paso por
Bs As justo coincidió que él estaba en la isla y no pudimos encontrarnos y eso
nos tenía fastidiosos a los dos.
Reclamos que nos pasábamos en
tono de chiste… facturas que volaban de un lado a otro… planteos y escenas de
celos por situaciones confusas… podíamos decir que el clima entre nosotros
estaba raro.
Llegué al auto y Moro se abalanzó
sobre mí.
Pau: _ Gracias Gon por venir a
buscarme! Sos lo más hermanito!!! Cómo se portó Moro?
Gon: _ de nada Pocha. Moro como
un duque… durmió todo el tiempo al lado de la puerta o en tu vestidor cerca de
tus zapatos. Este bicho vive para vos Pau.
Y si Morito era mi bebe, mi gordo
chancho, mi negro peludo… mi amor incondicional y puro, él vivía para mí y yo
para él. Cuando viajaba y no podía llevarlo lo extrañaba mucho más de lo que
podía imaginar.
Llamé a Sochi desde el auto para
pedirle que fuera yendo para casa, tenía solo un par de horas antes de tener
que estar en el canal, y no podía colgarme.
Me llamó la Bicho para ponernos
al día y la invité a que me acompañara, necesitaba un poco de apoyo logístico…
presentía que iba a ser una tarde movilizadora y mejor si no iba sola.
Gonza me dejó en casa y se fue,
lo invité a que se quedara pero se ve que tenía otros planes. Llegué y así como
estaba tiré toda la ropa que tenía en el lavadero y me metí a duchar.
Apenas salí del baño llegó la
Bicho y a los pocos minutos Sochi y todo su kit para ayudarme a preparar.
Prendimos la tele de fondo para ver La Cocina del Show.
Verlo ahí, paradito en su rincón
y saber que en un rato lo iba a tener en frente me hizo transpirar de nervios.
No había pasado un solo día en el
que no hayamos hablado por chat o por teléfono a toda hora. Nos extrañábamos
mucho. Estos casi 20 días separados no habían estado buenos.
Sobre todo la última semana y
media… desde que se mudó a la isla.
En los programas no paraban de
hablar de lo buenas que estaban las chicas que entrarían al reallity y tanto
Josema como Mariano bromeaban sobre lo difícil de mantenerse fiel ahí dentro
con tanta mina buena dando vueltas.
Dos tarados que lo único que
hacían era incrementar la locura que me generaba tenerlo lejos. En principio no
me afectaba la convivencia con otras minas que pudieran estar buenas, me
afectaba la distancia, el no poder vernos cuando quisiéramos, el tener que
ajustarnos a una visita de rutina una vez por semana… el no tenerlo para mí.
Recibí un mensaje de Pedro
preguntándome si había llegado y confirmando mi visita al programa. Intercambiamos
mensajes fríos. Éramos dos tercos y estaba claro que ninguno pensaba ceder
después de la discusión de anoche.
Mientras almorzábamos algo de apuro
que compró la Bicho y Sochi me peinaba, escuchamos como Mariano comenzó a
insinuarle a Pedro que una de las participantes nuevas llamada Agustina, podía
captar su atención.
Esto estaba pasando en vivo?
Mariano le estaba tirando onda
para que esté con otra mina? Y yo tenía
que ir a ese programa con mi mejor cara de póker a reencontrarme con él frente
a cámaras, para qué?
Lo que más me indignó, no fue el
doble sentido constante que Iudica usaba para hablar de lo que pasaría en la
Isla, sino que Pedro permaneciera inmutable frente a la insinuación.
Caliente e impulsiva como soy,
agarre el celular y le mandé un chat.
“la verdad que me sacaron las
ganas de ir”
Desentendido como siempre Pedro
solo me respondió un “Eh?” que no hizo más que potenciar mi enojo e
indignación.
“Eso Pedro. Que ya no tengo ganas
de ir, no le veo sentido. No quiero exponerme más.”
No respondió nada pero ni bien se
fueron al corte mi celular comenzó a sonar. Obviamente era él.
PP:_ me explicás ahora que te
pasa?
Pau:_ hola no? Digo…
PP: _ Paula no estoy jugando y no
tengo tiempo. Estamos en el medio del programa. No demos vueltas. Qué te pasa?
Pau: _lo que te puse recién. No
tengo ganas de ir para exponerme para quedar como una boluda frente a todos.
PP:_ juro que no se de que
hablas. Me explicas por favor?
Pau: _Nunca sabes de qué hablo
Pedro. Vos nunca registras nada de lo que pasa o es lo que me haces creer a mí?
PP: _ frená y bajá un cambio. De
verdad no sé qué decirte porque no entiendo qué pasa.
Pau: _ A esta altura da igual.
PP: _ No es que quiera sacarte de
encima ni evadir lo que sea que haya pasado, pero en cualquier momento volvemos
al piso y te voy a tener que cortar. Vení y hablamos tranquilos.
Pau: _Para qué querés que vaya?
Para boludearme?
PP: _ vos me estás hablando en
serio? Yo no lo puedo creer nena…
Pau: _ Yo tampoco lo puedo creer.
PP: _ Hacé lo que quieras Pau – y
me lo dijo con tristeza – te tengo que cortar.
Sentí que lo llamaban y que
hablaba con alguien más.
PP: _ya estás anunciada y todos
preguntan por vos. Fijate lo que vas a hacer y avísame. Yo te voy a estar
esperando.
Pau: _ no te entiendo Pedro.
PP:_ yo tampoco. – y cortó la llamada.
Sochi y la Bicho me miraban sin
comprender nada.
Tiré el celular en el sillón y
fui a desquitarme al baño la locura que sentía. Me miré en el espejo y estaba
roja. Había comenzado a brotarme… tenía mis clásicas ronchas en el cuello en
señal de los nervios que traía encima y los ojos inyectados de ira y
frustración.
Para qué mierda había dicho que
iría si desde el primer momento no quise que nuestro reencuentro fuera frente a
cámaras? Sabía que gran parte del enojo era conmigo misma por haber accedido a
algo que no quería.
Sochi me golpeó la puerta y me
hizo salir del trance.
Sochi: _Pau estás bien?
Abrí y salí. La miré y me abrazó.
Pobre Sochi… me había aguantado
en tantas que ya perdí la cuenta. Siempre me contenía y me cuidaba como una
hermana mayor o como una madre.
Sochi: _dale Pau, largalo. Qué
pasó… si estabas bien?
Me vi en la obligación de
explicarles a las chicas la discusión de anoche y todo lo que venía pasando en
estos últimos días.
Mis miedos y el fantasma de tener
una relación a distancia, y lo que eso significaba en mi vida. Experiencias de
relaciones anteriores donde la distancia, la inseguridad y los celos habían
arruinado todo y mi pelea interna por no volver a pasar por eso, cuando la
distancia era irremediable. No la habíamos elegido y prácticamente no nos
habían dejado opción. Pedro tenía que trabajar desde la isla y yo no iba a
instalarme con él ahí. Nuestra relación tampoco había crecido tanto como para
pasar las 24 hs del día juntos y por más que él me lo había pedido, yo lo había
descartado de entrada. Cosa que por supuesto a Pedro le emboló.
No solo me había negado a
instalarme algunos días con él, sino que había llegado a decirle (claramente
por orgullo) que no pensaba visitarlo y meterme en su trabajo para que nadie
dijera boludeces. La persecuta de que nuestra relación era sólo por buscar
cámara me seguía afectando y no quería que nadie pudiera siquiera insinuar que
yo iba a la isla para salir en algún programa.
Mis amigas me miraban un poco
incrédulas.
Bicho: _No sé amiga, a mi me
parece que te fuiste un poco de mambo.
Sochi: _hablás de Pedro como si
no lo conocieras Pau. Qué pasó con todo lo que sentías a fin de año? Donde
quedó la seguridad que habías logrado?
Entre las dos me convencieron de
que mi cabeza me estaba jugando en contra y que la equivocada había sido yo.
Pedro estaba actuando igual que
siempre y el boludo de Iudica era simplemente eso… “el boludo de Iudica” y no
había que darle mayor trascendencia ya que siempre jugaba frente a cámaras con
el doble sentido.
Volví a recibir un mensaje pero
esta vez era el Balita preguntándome a qué hora llegaría. Evidentemente Pedro
se había enojado y ahora que las chicas me habían lavado el cerebro, me sentía
un poco culpable por haberlo tratado así.
Decidí ir y enfrentar las cosas.
Por él y por mí y porque no sabía sino cuándo íbamos a poder hablar y
encontrarnos y tampoco daba para más.
Le respondí al Balita y también
le avisé a Pedro. Quería intentar suavizar un poco todo, pero como única
respuesta recibí un cortante “OK” dándome a entender que ahora el enojado era
él.
Llegamos al canal y nos recibió
Fede en el pasillo, mientras íbamos para camarines hablamos un poco del
lanzamiento del nuevo programa y de las expectativas que tenía toda la
productora en que saliera bien. Había sido una apuesta muy fuerte, con mucha
inversión y todos estaban revolucionados por el primer programa que saldría
apenas en unas horas desde el canal y desde la isla.
Ahí terminé de sentirme mal,
porque conociendo a Pedro, sabía que él tenía muy puesta la camiseta de Ideas,
y seguramente para él hoy también era un día importante y lleno de nervios. Le
habían dado mucha responsabilidad en cuanto a producción y él tampoco estaba
feliz con la idea de tener que alejarnos, pero sentía que le estaban dando una
oportunidad muy grande que no podía desaprovechar. Viéndolo así, estaba siendo
muy egoísta y recién ahora tomaba consciencia.
Mientras me maquillaban para
entrar al piso, el programa se fue al corte y Pedro vino a saludarnos. Moro le
saltó encima y yo morí de ternura al ver como jugaban a unos metros de donde
estaba yo.
Se acercó un poco más y ninguno
de los dos supo cómo actuar, era raro reencontrarnos después de tantos días, en
medio de tanta gente y después de haber tenido dos discusiones absurdas
telefónicamente en las últimas horas.
PP: _Hola – me saludó de parado y
a través del espejo con Moro en brazos – gracias por venir.
Pedro se escudaba en su roll de
productor? Se lo notaba tenso y confundido.
Pau: _no daba dejarlos clavados
si ya me habían anunciado.
PP: _ Yo te lo decía por mí, no
por el programa.
Y sus palabras me sacudieron. Qué
estaba haciendo? De golpe me vi tratándolo a Pedro como no quiero que me traten
a mí… haciéndolo sentir como si todo fuera para las cámaras… y me sentí una
tarada por haberme dejado influenciar tanto por el entorno.
Lo miré arrepentida y antes de
que pudiera decir algo él volvió a hablar.
PP: _tengo que entrar – dijo
mientras bajaba a Moro – nos vemos ahí – y giró para irse.
Pau: Pedrooooo –lo llamé alzando
la voz para que me mirara – hablamos
después?
PP: _ te vas a quedar? – me
preguntó confundido.
Pau: _ Si. Necesito que hablemos.
PP: _ Yo también.
Y volvió a girar para alejarse y
entrar al estudio.
Terminé de prepararme y me
acerqué al control a saludar. En el pasillo me encontré con algunas chicas y
automáticamente cambié el chip. Necesitaba mostrarme contenta de volver. Las
chicas me llenaron de cartas y regalos y con tantas demostraciones de cariño me
devolvieron la seguridad… estaba recuperando la alegría y la confianza. Ahora
podía volver a enfrentarme a las cámaras.
Pampita estaba como invitada y eso
me hacía sentir más tranquila. La conocía y sabía que no se iba a prender en
nada que pudiera perjudicarme ni dejarme expuesta. Entre ella y Sofía, me
sentía un poco contenida y aliviada.
Me presentaron y entré contenta
de volver. Escuchar los gritos de las chicas me motivaba. Me dispuse a
divertirme y a pasarla bien y dejar de lado toda la confusión para cuando
pudiéramos estar solos.
Pedro estaba distante, en su
rincón. Atento a mis movimientos y mis palabras pero sin intención de
acercarse. Obviamente estaba dolido.
En estos meses había aprendido a
conocerlo y sabía que en muchas cosas éramos bastante parecidos. Yo era orgullosa y él también. Yo era
caprichosa y él también. Quizás justamente eso era lo que más afectaba nuestra
relación. Nos costaba mucho reconocer cuando nos equivocábamos y ni hablar de
dar el brazo a torcer.
Yo trataba de buscarlo con la
mirada para hacerlo aflojar y para que entendiera que mi enojo tenía una
explicación y que pronto le iba a aclarar todo para que él pudiera
comprenderme, pero Pedro se mantenía
serio y lejano, lo cual empezó a incomodarme.
En algún punto yo estaba
acostumbrada a que fuera él siempre el que la remara y que en este caso los dos
tuviéramos motivos para estar enojados, cambiaba las reglas de juego entre
nosotros.
Mariano para variar se provechó
de eso y comenzó a hacer más incómoda la situación remarcando el mal humor de
Pedro y pidiéndole que cambiara la cara, Pampita saltó a defenderlo pero sin
darse cuenta soltó un “está mal de amores, déjenlo” abriendo el juego y dejando
en evidencia frente a todos, que las cosas entre nosotros no estaban bien. Y me
compadecí de él, de mí de la situación y de nuestra eterna exposición mediática
que atentaba contra nuestra intimidad y nuestros tiempos.
Creo que a él le pasó lo mismo y
lo vi esforzándose por cambiar la onda.
Por suerte Moro entró al estudio y ganó protagonismo. El chancho nos
estaba salvando de entrar en ese terreno gris de tener que dar explicaciones si
a Mariano se le llegaba a ocurrir soltar su lengua.
Mariano:_ mirá quien está acá!
Moro… es tu hijo.. lo extrañas? – yendo hacia donde estaba Pedro parado
observando.
PP: _ Si Mucho – dijo evitándome
la mirada.
Mariano: _El perro se extraña
cuando una pareja digamos esta así…? - le preguntó a Pedro dando a entender que
estábamos distanciados, cosa que me emboló.
PP: _hubo muchos días que yo lo
cuidaba y lo extraño… - dijo aún sin mirarme.
Pau: _Los días que se levantaba
temprano – se me escapó decir y automáticamente me dio timidez bardearlo porque
no era mi intención exponerlo más… así que me vi en la obligación de recomponer
lo dicho – no la verdad que no, que fue un pilar fundamental para la final
porque yo me levantaba a las 8 de la mañana y Pedro estaba ahí cuidándolo a
Moro – dije rápido sin saber del todo lo que decía para evitar aumentar su
enojo.
Mariano divertido por la
situación soltó un “No puedo creer que esto esté pasando en vivo” pero en el
fondo él lo disfrutaba, estaba en su salsa. Nos seguía manejando como títeres
funcionales al programa y nosotros dos caíamos una vez más en eso que dijimos
hasta el cansancio que teníamos que evitar. Exponernos.
Decidimos entre todos distender
un poco la situación poniéndole humor porque sino terminaríamos abriendo una
puerta que nadie sabe a dónde llevaría.
Pedro intentaba al aire demostrar
su vínculo de padre con Moro llamándolo a ver si el chancho le obedecía, pero
por supuesto Moro estaba en la suya, olfateando todo sin registrarlo, lo que
despertó mi compasión ya que no quería que Pedro sintiera que estábamos en
veredas opuestas. Siempre habíamos
jugado para el mismo equipo, y me incomodaba sentir esa especie de disputa al
aire entre nosotros. Tampoco es que nos habíamos separado… simplemente no
habíamos podido hablar para pasar en limpio nuestra relación y cómo seguir.
Con Moro como excusa, nos
cruzamos un par de facturas y empezamos a histeriquearnos… como siempre… era
muy difícil para nosotros no soltar lo que nos pasaba y nos olvidábamos por
momentos de las cámaras, acostumbrados ya a que toda suceda al aire. Reclamos
encubiertos, celos camuflados detrás de bromas, hasta que empezaron a reclamar
que Pedro también tenía derecho a pasar tiempo con el perro y que se lo diera
para llevárselo a la isla. Creo que ese fue mi límite. Con mi chancho no! Por
las dudas deje en claro que se lo prestaba sólo un día, cuando yo trabajara.
Pau: Pero pará, un día porque
realmente lo extraño de verdad. Es como un hijo – me vi obligada a aclarar – Lo
extraño, lo siento, lo necesito.
PP: _Y a mí? – disparó Pedro al
aire y sin ninguno filtro – y a mí? – volvió a preguntar descolocándome por
completo.
Pau: _no me corras… - dije
actuando lo más naturalmente posible sin poder creer que esto estuviera
saliendo en vivo mientras comenzaba a sentir que las piernas se me aflojaban.
Y de golpe todas las miradas se
centraban en nosotros y todos estábamos igual de descolocados y tanteando como
salir de ahí.
Pero la tensión estaba en el aire
y ni Pedro ni yo podíamos hacer de cuenta que lo que pasó no pasó, ni nos daba
para seguir mirando para otro lado.
Estaba a la vista que nos necesitábamos, que necesitábamos aclararnos y
pasar este mal rato… entendernos, acercarnos. Volver a ser nosotros.
Cuando lo vi acercarse me
paralicé. Mientras lo tuviera a distancia todo se me hacía más manejable, pero
en cuento Pedro irrumpiera en esa barrera invisible que nos separaba a cada uno
de un lado del estudio… yo sabía que iba a flaquear, y obviamente me tomó por
sorpresa su actitud. De golpe lo tuve
parado enfrente a centímetros nada más y me olvidé de todo y de todos.
Pedro me agarró por la cintura
atrayéndome hacia él y llevó mis brazos a su cuello logrando que lo abrazara al
mismo tiempo que él besaba mi mejilla para después hundirse en mi cuello, lo
que terminó de desarmarme. Sin ser consciente de lo que hacía busque su cara
para darle un beso, y abrazarlo más fuerte. No era momento para hablar pero me
llenaba de tranquilidad sentirlo aferrado a mí nuevamente. Nos pedimos en
secreto disculpas por las discusiones de estos días y quedamos en hablar más
tarde.
En cuanto nos separamos me volvió
a la mente la frase que tan mal me había puesto antes de venir y quise pedirle
a Mariano que me explicara… quizás Pedro realmente no tuviera nada que ver y yo
me había enojado con él por algo que en realidad me molestaba de Mariano.
Así que sin rodeos le pregunté en
secreto por qué había insinuado al aire que Pedro podía interesarse en
Agustina.
Marian: _apa te pico – tiró
divertido y disfrutando de la situación.
Pau: _ Si yo quiero saber – lo increpé
- porque no entendí, estaba así en mi casa, y me dije… - Mariano no me dejó
terminar que comenzó a explicar la situación para que todos entendieran de qué
hablábamos.
Mariano: _cuando estábamos
hablando de Agustina, una de las participantes del bailando que es muy bonita,
yo en un momento me acerqué a Pedro y le hice “pilluelo” y con su dedo hizo el
gesto que acompañaba ese término que comenzaba a irritarme.
Y esta vez lo interrumpí yo “como
hacías conmigo cuando estábamos arrancando en el bailando¨ - dije con plena
calma y mi mejor sonrisa, sabiendo que a Pedro le estaba cayendo la ficha
recién ahora de lo que desató mi enojo hacía un rato.
Me miró con una sonrisa
demostrándome que había entendido y un poco divertido por la situación de que
lo celara en primera medida y que le estuviera poniendo los puntos a Iudica al
aire como segunda.
La situación se convirtió en algo
gracioso más que nada porque estábamos en vivo. Yo ya no tenía nada que perder,
así que disfrutaba divertida los intentos de Mariano por zafar de darme
explicaciones y cómo salir airoso de ese brete en el cual él mismo nos había
metido por cizañero. Nos seguimos pasando algunas facturas más al aire y me
encargué de marcar territorio a los cuatro vientos para que a nadie le quepan
dudas que Pedro no estaba disponible. Estaba celosa y no tenía problema ya de
blanquearlo .Seguía esperando mi explicación, y Mariano daba vueltas
evitándome. Estaba más que claro, que no podía refutar mi planteo. Su
comentario me había caído mal y se lo hice saber. Pero tenerlo a Pedro a mi
lado, de mi lado, ya me devolvía toda la seguridad que había perdido en estos días.
No es que ya todo estuviera bien
entre nosotros… teníamos varios puntos que aclarar y era obvio que estando
frente a cámaras, no lo íbamos a poder hacer. Pero en el corte hablamos más
tranquilos y nos pusimos de acuerdo para seguir conversando después de que
terminara el programa, porque lamentablemente Pedro debía quedarse para el
estreno de la noche y no estaba seguro de cuando iba a poder volver a tierra
firme.
Pau: _Hoy tenés que irte a dormir
allá? No podes quedarte y viajar mañana?
PP: _No Pau, hoy es la noche de
bienvenida, se hace una fiesta después del programa y acordate que esto es un
reallity, las cámaras siguen prendidas grabando y lo que pase en la noche es
importante.
Pau: _y cuando volves para acá?
PP: _de verdad no estoy seguro.
Todo se va a ir viendo día a día, dependiendo de lo que vaya pasando. Nosotros
estamos como productores de los participantes, estamos para solucionarles temas,
contenerlos, motivarlos… no laburamos con horarios. Ya te lo expliqué.
Pau: _ya sé, pero me cuesta
entender como sigue lo nuestro sin saber cuándo nos vamos a ver.
PP: _yo sé que es complicado lo
que te estoy pidiendo pero necesito que me banques Pau. No depende de mí.
Y yo lo entendía pero no lo podía
procesar. Me enojaba la situación. Me enojaba no poder transmitirle que yo
también lo necesitaba y lo mal que me hacían las distancias. En vez de
compartir con él mis miedos, decidí que tenía que mostrarme fuerte, superada…
segura. Si lo razonaba en realidad no hacía mucho tiempo que estábamos y
tampoco éramos formalmente novios porque no habíamos tenido tiempo para
establecernos como tal. Así que internamente decidí dejar que las cosas pasaran
y ver qué salía de todo eso.
El programa seguía al aire y
llegó Canosa de invitada, ya que sería la conductora del Soñando por Bailar y
había que venderlo.
Jugamos al aire un pase de
facturas más entre ella y nosotros, porque nunca había creído en nuestra pareja
y de golpe nos estaba analizando como si nos conociera de toda la vida.
En un momento empezaron a
especular cuál de los participantes que entraba esa noche, sería el que no
continuara, ya que hoy mismo uno de ellos quedaba fuera de la isla y Pedro, quien
más cerca estaba de ellos y quizás quien más los conocía, no quiso responder.
Marian: _ Pedro, para vos quien
se va?
PP:_ no sé, no te lo puedo
responder…
Pau: _ay nunca te jugas por nada –
se me escapó decir sin pensarlo demasiado.
PP: _por vos me juego siempre –
me dijo serio clavándome la mirada y demostrándome que no le había caído bien mi
comentario.
En realidad yo no lo había dicho
con esa intención. Tenía claro que por mí había hecho cosas que nunca podría
haber imaginado y que siempre había quedado expuesto y no siempre muy bien
parado… pero yo se lo decía porque en lo laboral, sentía que a veces Pedro era
un tibio. De todos modos reconocí (sólo para mí misma) que mi comentario no
había sido el más acertado para tirar al aire. Yo también debía aprender a
poner un filtro y algunas cosas dejarlas para decirlas cuando ya nadie nos
escuchara.
El programa finalmente llegó a su
fin y con Pedro nos fuimos a uno de los camarines para hablar tranquilos.
PP: _bueno acá estamos.
Pau: _si Pedro ya sé que estamos acá
– dije molesta pero más que nada por no saber cómo arrancar ni qué decir. Honestamente
sentía que no tenía nada en limpio para decirle.
PP: _podés cortarla Pau? – dijo con
tono cortante – qué te pasa?
Pau: _no sé. – y se me hizo un nudo
en la garganta.
PP: _qué es lo que no sabes? – me
increpó
Pau: _No sé nada Pedro. Eso me
pasa. No sé cómo seguimos. No sé cómo se hace. No sé si vamos a poder bancarlo.
No sé nada, entendes? – dije casi llorando de bronca por tanta
incertidumbre.
PP: _Pau… - dijo con calma e hizo
una pausa – mirame. Dale mirame – y con su mano alzó mi cara tomándome por la
pera con suavidad – soy yo. No cambió nada.
Y mirarlo a los ojos me recordó quiénes
éramos los dos.
PP: _Hola! – poniendo carita de
perro abandonado – te extrañe mucho, sabes? – dijo haciendo un puchero con toda
su cara y alzando las cejas.
Su cara, su gesto, su voz, su
forma de hablarme y tenerlo tan cerca me desarmaron por completo y me permití
que alguna lágrima finalmente se escapara de mis ojos. Intenté armar una
especie de sonrisa entre muecas ya que me temblaba el mentón, y él me sonrió
compasivo.
Sin pedirme permiso se acerco y
me rodeó con sus brazos conteniéndome por completo. Cuando Pedro me abrazaba yo
me sentía chiquita, sentía que entraba en su hueco y que ahí podía quedarme a
vivir o al menos a esperar que pasara cualquier tormenta por peligrosa que
fuera. Si Pedro me abrazaba todo era paz.
Me dejé abrazar y me aferré a él
con todas mis fuerzas. Yo también lo había extrañado y mucho. Recién ahora que
volvía a sentirlo así tan mío y a sentirme yo tan suya, me permitía dejar salir
eso que de verdad sentía por él. Estando en sus brazos, no quería ser fuerte ni
independiente. Quería y necesitaba ser Yo.
PP: _ahora sí nos vamos acercando
más a la idea que tenía de reencuentro – soltó Pedro con un tono algo gracioso
mientras acariciaba mi espalda y mi cabeza.
Me separé de su abrazo apenas
para mirarlo a los ojos y sonreírle. Pedro me podía entera.
PP:_ Hola! – dijo con un tono muy
gracioso y sobre actuando para después mirar mi sonrisa y fijar sus ojos en mi
boca – por Dios como extrañaba tu sonrisa.. o quizás sea tu boca?... a ver?
Se acercó despacito, acortando
cada centímetro que nos separaba y disfrutando de esa espera hasta que por fin
impacto en mis labios y se adueñó de un beso y de todo mi ser.
Nos besamos dejando de lado todas
las discusiones y toda la distancia. Nos besamos para recuperar algunos de
todos esos besos que nos prometíamos durante esos días que no nos vimos. Nos
besamos sin pensar en el después. Nos besamos para entendernos, para
reconocernos.
Nos separamos solo para fundirnos
en un abrazo y en un suspiro. Yo tenía mi cabeza hundida entre su cuello y su
pecho y el su cabeza entre mi hombro y mi cuello, dejándome suaves besos que me
llenaban de amor y compensaban en parte la soledad y los desencuentros.
Pau: _no vale así – solté sin
moverme de de su abrazo.
PP: _qué es lo que no vale? –
preguntó siguiendo con los besos.
Pau: _que me hagas olvidar de
todo con besos – y alcé apenas mi cara para buscar su mirada.
Pedro levantó su cabeza y mirándome
a los ojos me respondió…
PP: _gorda no tengo demasiadas
respuestas. Lo único que tengo claro es lo que me pasa con vos. El resto creo
que lo vamos a tener que descubrir juntos y sobre la marcha. Si hacemos que
funcione, va a funcionar.
Pau: _y si no funciona? – pregunté
con algo de tristeza y miedo.
PP: _y si hacemos que funcione? –
me refutó – Mirá- dijo sentándose en una de las sillas del camarín y colocándome
a mí sobre sus piernas – nada cambia para mí Pau. La única diferencia es que no
te voy a poder llenar de besos todos los días y que los voy a ir acumulando en
mi bolso para traerlos y dártelos todos juntos apenas pueda.
Y la imagen tierna de un bolso
lleno de besos me hizo sonreír boba de amor.
PP: _amor no va a pasar nada. No
te comas la cabeza.
Pau: _no soy muy amiga de las
distancias Pepe, ya te explique. No me llevo bien con las relaciones así. No
tuve buenas experiencias.
PP: _gorda no me voy a la India,
estoy acá nomás en Tigre. Ya te dije que si es por mí te llevo conmigo. Sos vos
la que no querés venir. Vos podés visitarme cuando quieras, venir y quedarte y
yo voy a venir cada vez que pueda. Te lo prometo.
Pau: _ya te expliqué por qué no
quiero ir. – dije dándole cierre a esa opción ya que no quería volver a
discutir ese punto.
PP: _Ok, lo sé. No lo comparto
pero lo acepto. Entiendo tu planteo y que no quieras mezclar las cosas. Pero
bueno, yo siempre voy a estar. Igual que ahora. Y si pinta que nos veamos… algo
vamos a inventar. Confiá en mí. Creamos en nosotros.
Pau: _ Yo confío en vos y creo en
nosotros – respondí seria para no dejar el más mínimo lugar a la duda. – en lo
que no confío es en sobrellevar la ausencia y en los malos entendidos.
PP: _Si no permitimos que pasen,
no va a haberlos. Y yo prometo estar presente todo lo que pueda, como hicimos
estos días. Vamos a hablar todo el tiempo, por celu o por chat. No te voy a
dejar en paz vas a ver – y me dio un beso en la punta de la nariz – vas a ser
vos la que no me de bola.
Pau: _no seas tonto. Siempre te
doy bola. – dije despeinando los pelos sobre su frente y acariciando su nuca.
PP: _no siempre, pero mejor no
entremos en detalles – dijo mientras se apoderaba nuevamente de mi boca para
callarme con un beso – te juro que odio tener que cortar el clima pero tengo
que ponerme a laburar.
Pau: _ ya sé. Esto es una
revolución, todo el canal está alterado. – dije levantándome de sus piernas.
PP: _si. Digamos que nos tiene
que salir bien… se invirtió mucho en el nuevo programa – soltó mientras tironeaba
de mi mano para volver a acercarme a él – pero no quiero hablar del programa,
quiero que nos despidamos bien – y me tomó por la cintura para volver a
abrazarme y besar mi cuello.
Pau: _La van a romper, olvidate! –
dije abrazándolo y acariciando su espalda.
PP: _a la única que quiero romper
es a vos – dijo sensualmente en mi oído.
Pau: _sos un tarado – reí dejando
un golpe en su hombro mientras me hacia cosquillas con sus besos en mi cuello.
PP: _pero te encanto así de
tarado – dijo jugando con mi nariz y provocando a mi boca.
Pau: _ahhh pero como te la estás
creyendo! – lo burlé mientras dejaba pequeños besos en su mentón y nariz.
PP: _te morís por mí. Admitilo
Chaves. No podés resistirte a mis encantos.
Pau: _ no quiero resistirme –
dije fijando mis ojos en su boca – que es muy diferente.
Y ambos nos besamos llenos de
deseo y de amor contenido. Un beso largo y dulce. Un beso profundo y sincero.
Un beso que nos alcanzara hasta nuestro próximo encuentro.
Hola hola hola todos. Luna nuevamente reportándose desde la estratósfera para hacerles una nueva entrega.
Antes de que comiencen los insultos por la temática abordada, quiero que sepan que es un Epi hecho a pedido... asi que pueden guardar los reclamos que les paso luego las responsables...
Sobre todo en la parte final.
Por si no quedó claro... este nuevo Episodio constará al menos de 3 partes... y todo concluirá quizas en la fecha más negra del calendario Pauliter.
Aún así espero que lo disfruten.
Pueden comentar cuanto gusten.
Hasta la 2da parte! (que espero sea pronto!!!) Gracias!
Jajaja aca me parece que sos vos la que te lavas las manos...
ResponderEliminarMe encantó! Amo como relatás con detalles todas las cosas que no vemos, quedan tan reales y encajan perfecto con ellos, sos una genia Lu, por eso te pedí este epi, porque se que sos genial escribiendo y que las partes que le sigan van a ser iguales o mejores que este!
Ya espero ansiosa (como para variar) la próxima parte, ojalá prontito nos sorprendas!
Un beso y gracias por este epi;)
jajajaj Gracias Lu!!!!
Eliminarlo dificil viene despues de esta parte..
ahi me quiero ver escribiendo ;)
besoooo
me encantó q lo hayas arrancado desde acá! estuviste genial como siempre Luna! hay cosas q ni me acordaba! ese Pedro yendo a buscar a Pau parada enfrente del horno para luego abrazarse y besarse en frente de todos! q expuestos q estaban! pobres! y con eso de q se guarden los comentarios no hay problema! sepan q esta ruptura los hizo fortalecer como pareja! como pasa en todas! siempre hay un quiebre! ellos arrancaron a partir de ella! no bardeen! ;)
ResponderEliminarexacto!!!
EliminarGracias Lau, me divierte ir para atras y agarrar esos momento emblematicos...
vamos a ver qué sale ahora!
;)
Ayy Lunita Lunita!!! Me gustó este capítulo, pero temo que en los próximos (en el último en realidad) me voy a enojar con vos, me vas a hacer recordar ese 5 de Febrero me parece... Igual, todo bien, porque adoro tus epis!!! Que arranques bien la mini semana!!! Besos y gracias!!!
ResponderEliminarno temas Mavi... que ya sabes que triunfa el amor!!!
EliminarEnjoy it!
besoo
Me encantó!! Esperamos la segunda parte y la tercera va a ser difícil de leer!! Yo hasta el día de hoy no pudo ver LCDS del 5 de febrero!! Fue muy triste!!
ResponderEliminarpero ahora que ya sabes el futuro que les esperaba deberias disfrutar... ese dia fue en quiebre.. miralos ahora ;)
Eliminarme encanto, ojala subas pronto el 2do ... te tiro la temática para el próximo "el regreso de pau de su viaje a mexico"
ResponderEliminarvoy a demorar unos dias pero intentare que no sean tantos..
Eliminarde cual de sus viajes? el del año pasado q fue con la mama?
Ok... como siempre, AMO COMO ESCRIBIS, sos genial y es verdad que haces tan real la historia describiendo lo que no se ve....
ResponderEliminarSea cual sea el topico o epoca de la vida de PyP que abordes, es 100% disfrutable. Es un tema triste, pero, ¿puedo sugerir algo? nos adelantaste que la ultima parte probablemente termine en el 5 de febrero pero, ¿puedo sugerir que termine 3 o 4 dias despues? cuando en realidad por lo que Pedro varias veces, se reconciliaron y decidieron "guardar su relacion" de las camaras ..... es solo una idea y, te aseguro que dejarias a tus lectoras felices en lugar de angustiadas al recordar ese verano dificil.
De todas formas, decidas o no ir por esa ¿4ta. parte podria ser?, te apoyo 100% y disfruto muchisimo TODOS tus "Episodios Inspirados" por lo que solo me queda decirte GRACIAS por escribir y dejarnos disfrutarlo.- Besos.....
Gracias Patri!
EliminarEste Epi va a terminar con su separacion.. porque de eso se trata todo y de ahi el nombre que le puse...
no quita que más adelante pueda hacer un Epi de esa etapa de "clandestinidad" en la que estaban juntos pero sin blanquearlo...
quedarà en mi lista de posibles Epis a ver si me inspiro....
;)
Holaa!! Lo volví a leer por segunda vez y me re emocioné. Lograste que me pusiera en la piel de Pau y comprenderla. Recordé ese programa y muchas cosas las entendí pq en ese momento creí q solo era una peleíta y nada más. Debe haber sido muy difícil para ellos enfrentar todo lo que les pasaba frente a las cámaras. Gracias, escribís muy bonito. Esperamos otro epi muy prontito!! :-)
ResponderEliminarMuchisimas gracias Marita!!!
EliminarIgual (lo aclaro aunque es obvio) es solo mi intrepretacion de los hechos... quizas nada que ver y yo me hice este pelicula! jajaa
Lo tuyo es un don: poder transportarnos a través de la lectura de tus capítulos a ese momento y, hacerlo vivir como si fuera real. Es increíble lo que generás cuando escribís. Felicitaciones!!! Soy @aby202923
ResponderEliminarMuchisimas gracias Gabriela!!! es un placer saber que lo que hago como juego o como hobby le llega a otros ;)
EliminarGracias de verdad!